EJERCICIO AERÓBICO Y ANAERÓBICO: DIFERENCIAS Y BENEFICIOS

A muchos de nosotros nos sonarán estas dos palabras que a menudo se suelen utilizar en
gimnasios, revistas y charlas deportivas: Aeróbico y Anaeróbico. Estos conceptos hacen referencia a la manera que tiene el organismo de obtener la energía: con necesidad de oxígeno (aeróbico) y sin necesidad de oxígeno (anaeróbico). Aunque no todo es blanco o negro, siempre intervienen los dos pero con predominancia de unos de ellos, por eso se debe de decir que un ejercicio es predominantemente aeróbico o anaeróbico.
Complicado?... Te lo explicamos:

·       Ejercicio Aeróbico: son ejercicios de media o baja intensidad y de larga duración, donde el organismo quema hidratos y grasas para obtener energía y para ello necesita oxígeno.

-      Ejemplos: correr, nadar, ir en bicicleta, caminar, etc. Se suele utilizar a menudo para bajar de peso, ya que como hemos dicho, con este tipo de ejercicio se quema grasa. También, al necesitar mucho oxígeno, el sistema cardiovascular se ejercita y produce numerosos beneficios. (A esto le llamamos Cardio)

·        Ejercicio Anaeróbico: son ejercicios de alta intensidad y de poca duración. Aquí no se necesita oxígeno porque la energía proviene de fuentes inmediatas que no necesitan ser oxidadas por el oxígeno, como son el ATP muscular, la PC o fosfocreatina y la glucosa.

-    Ejemplos: rutina de pesas, carreras de velocidad y ejercicios que requieran gran esfuerzo en poco tiempo. Este tipo de ejercicios son buenos para el trabajo y fortalecimiento del sistema musculoesquelético (tonificación).

La elección de un tipo de ejercicio depende de los objetivos que se tengan, aunque en el ámbito de la salud es recomendable alternar y complementar ambos tipos de ejercicios, ya que se conseguirán beneficios cardiovasculares y musculares. Ya en temas de rendimiento se suele dar más importancia a uno de los tipos según la finalidad, aunque sin olvidarnos del otro.

Publicar un comentario

0 Comentarios